¿
Será capaz Pupé de encontrar estos textos?La esperanza de que todavía me busque.
Pero aquí es menos malo, aquí nadie lee, nadie juzga, nadie prejuzga. La idea es sentirse libre y mostrar las entrañas, algo siempre en extremo difícil. Voy a tratar de hacerlo, amigos reales e imaginarios. Al final los textos son para ser leídos por alguien, aunque sea una pupé imaginaria. La idea es que éste diario sea hallado.
Me quedan pocas fuerzas, esa es la verdad.
Ella, ahora, es el amor de mi vida, mi princesa, mi niña
¿Lo sabrá?
No le creo cuando afirma que su corazón se volvió de piedra, y si es cierto es que siempre fue de piedra, pero yo no le creo y si ella dice eso es que ella quiere creer que se volvió de piedra, mas se engaña así misma. Eso debe ser, se autoengaña porque ella no miente, no está en su cultura, las muñecas no mienten, mucho menos si son imaginarias.
Hoy me encontré con Paula L ¿Le habré parecido viejo? Ella está igual, debe de tener unos 50 o por ahí, como yo. No nos saludamos, sé que ella me reconoció, no se le va una a esa mina, pero se hizo la hueona y yo me hice el hueón. Nos cruzamos en la calle, Paula L iba en bici y yo trotando rápido.
Era divertida, media pelusona, Paula L, quizás burlona y sarcástica. Ella tenía un tipo aindiado, pelo negro en melena corta, ojitos pequeños, piel canela, un busto pequeño, una piernas muy gruesas y/o musculosas y voz grave. Fumaba.
Nunca hablamos mucho, no fuimos cercanos. Paula L ahora es mamá y me imagino tendrá un marido o similar. En primer año recuerdo que fue reprobada en un ramo de forma humillante. Su cara se puso roja delante de la comisión. Yo estaba viendo su examen. Recuerdo que al ver eso, me dieron ganas de abrazarla y darle besos, pero en ese momento no nos conocíamos. De aquello ya pasaron más de treinta años ¡Que horroroso!